Pasos para redactar un CV profesional
1. Escoge el formato correcto
Seleccionar el formato correcto es esencial, ya que define cómo se presenta tu información y qué tan fácil el reclutador puede ver tu perfil. El objetivo del formato es resaltar tus fortalezas y restarle relevancia a tus debilidades. Por ejemplo, el formato cronológico, el más común, destaca tu evolución laboral y logros a través del tiempo, en cambio, el formato funcional es útil si tienes vacíos laborales, ya que enfoca la atención en tus habilidades y competencias. El formato combinado mezcla ambos, siendo ideal para mostrar experiencia y fortalezas técnicas.
2. Agrega tus datos de contacto
Piensa la cantidad de candidatos que tiene que evaluar un reclutador, y por lo tanto, tiempo limitado. Si tu información de contacto no está clara o bien escrita, es muy probable que el reclutador se mueva hacia el siguiente candidato. Por eso, incluye información clara y visible: nombre completo, número de teléfono, ciudad de residencia, correo electrónico (educativo o profesional idealmente) y tu perfil de LinkedIn. Asegúrate de que los datos estén actualizados y visibles al inicio del CV.
3. Incluye tu perfil profesional (resumen profesional)
Es en definitiva, el primer filtro de los reclutadores. Dada la gran cantidad de perfiles que un reclutador tiene que analizar, el resumen del perfil profesional es la primera impresión que tendrá la persona que está seleccionando.
Este párrafo introductorio debe capturar tu perfil en pocas líneas, mencionando tu experiencia, logros principales y habilidades diferenciadoras. Idealmente, adapta este resumen para cada postulación, alineándolo con el cargo específico. Lo más importante es que puedas articular tu propuesta de valor y cómo puede contribuir a la compañía a la que postulas. Esta sección debe captar la atención del reclutador y dará paso a que siga leyendo tu CV.
4. Describe tu experiencia laboral.
Enumera tus empleos comenzando por el más reciente. Por cada posición, incluye el cargo, nombre de la empresa, fechas de inicio y término, responsabilidades clave y lo más importante: tus logros alcanzados. Utiliza verbos de acción como "lideré", "coordiné", "implementé" y cuantifica los resultados obtenidos (por ejemplo, "aumenté las ventas en un 20%"). Personaliza esta sección dependiendo del tipo de cargo al que postulas. Esto le permite al reclutador evaluar tu valor e impacto real en cada rol.
5. Incluye tu educación y habilidades atingentes
La mejor forma de destacar tu background académico es mencionar tus títulos en orden cronológico inverso, con nombre del establecimiento, grado académico y año de egreso. Si eres recién titulado, puedes destacar trabajos académicos relevantes, proyectos o certificaciones complementarias.
Luego, presenta en forma de listado tus habilidades duras — hard skills (como manejo de software, idiomas, metodologías) y blandas — soft skills (comunicación, trabajo en equipo, liderazgo), indicando cómo las has aplicado en el entorno laboral.
6. Considera información adicional relevante.
Añadir información adicional, como proyectos, conocimientos de idiomas y certificados, puede enriquecer tu CV al demostrar tus habilidades.
En el caso de los proyectos, incluye aquellos relevantes para el puesto al que te postulas. Describe el proyecto, tu puesto, las habilidades que utilizaste y los resultados obtenidos. Esto puede demostrar la aplicación práctica de tus habilidades. Los conocimientos de idiomas pueden ser una gran ventaja, especialmente para trabajos que requieren comunicación con clientes o colegas internacionales. Indica los idiomas que dominas y tu nivel (básico, conversacional, fluido, nativo). Los certificados también deben ser relevantes para el puesto. Incluye el nombre del certificado, la institución que lo emitió y la fecha de finalización. Si se trata de una certificación reconocida en tu campo, puede aumentar significativamente tu credibilidad. Estos detalles adicionales pueden diferenciarte de otros candidatos, mostrando una gama más amplia de habilidades y un compromiso con el aprendizaje continuo. Asegúrate de que toda la información adicional aporte valor y relevancia a tu solicitud.
7. Agregar las referencias(?)
Hoy en día ya no es necesario incluir las referencias directamente en el CV. En vez de ellas, es más común escribir "Referencias disponibles a solicitud" al final del documento, lo que permite reservar espacio para información más importante y respetar la privacidad de las referencias.
Recuerde notificar a sus referencias cada vez que proporcione su información de contacto a un posible empleador, para que puedan ofrecer una recomendación sólida y positiva.
8. Personaliza tu CV a la descripción del cargo.
Adaptar tu CV al puesto al que te postulas es crucial, ya que demuestra a los empleadores potenciales que eres el candidato ideal para el trabajo. Esto implica ajustar el contenido para que se alinee con la descripción del puesto, incluyendo palabras clave y habilidades. Usar palabras clave específicas de la descripción del puesto ayuda, ya que muchas empresas utilizan Sistemas de Seguimiento de Candidatos (ATS) para filtrar los currículos. Estos sistemas buscan palabras clave relevantes para determinar si el CV de un candidato se ajusta a los requisitos del puesto. Adaptar tus habilidades también es esencial. Resalta las habilidades mencionadas en la descripción del puesto, demostrando no solo que las posees, sino también cómo las has aplicado en tu experiencia laboral. Esta personalización demuestra que te has tomado el tiempo para comprender el puesto y las necesidades de la empresa, y facilita que los responsables de contratación vean cómo tus cualificaciones se alinean con el puesto.
9. No olvides
La corrección es vital porque garantiza que su documento esté libre de errores ortográficos, gramaticales, de puntuación y de formato. Cualquier error puede causar una mala impresión en los posibles empleadores, sugiriendo falta de atención al detalle, malas habilidades de comunicación o falta de seriedad en la solicitud. Los errores pueden resultar en el rechazo de su solicitud, independientemente de sus cualificaciones o de si es apto para el puesto. La corrección también le permite revisar el contenido para comprobar su claridad y relevancia. Es una oportunidad para garantizar que la información sea precisa, concisa y se ajuste a la descripción del puesto. Por lo tanto, la corrección no solo previene errores potencialmente perjudiciales, sino que también ayuda a mejorar la calidad y la eficacia general.